Durante el Acto de Reconocimiento a personalidades y organizaciones de destacada trayectoria nacional realizado por la Cámara de Diputados, el 28 de septiembre, en instalaciones de la Asamblea Legislativa. Después de la entrega del reconocimiento al ITEI y a sus fundadores Emma Bolshia Bravo Cladera y Andrés Gautier Hirsch, no se pudo efectivizar los 3 minutos que tenia la directora para agradecer el reconocimiento. Por lo cual publicamos a continuación las palabras que debía dirigir ese momento la directora ejecutiva del ITEI Emma Bolshia Bravo Cladera.
Buenos días. Un saludo para los diputados y las diputadas aquí presentes, uno especial para la diputada Betty Yañiquez Loza.
Amigos y amigas, Compañeros y compañeras de las asociaciones de víctimas de las dictaduras y de gobiernos constitucionalmente elegidos gracias infinitas por acompañarnos hoy día, su presencia nos honra.
Es un honor para mí́ estar en este evento, y hacer uso de la palabra representando a mis colegas del ITEI. A quienes les voy a pedir que se pongan de pie.
Agradezco a nombre de ellas y ellos. este reconocimiento, que nos da la oportunidad de compartir nuestros logros y también los retos que enfrentamos. Que pone en evidencia el trabajo que el ITEI ha realizado durante más de dos décadas, y a través del cual ha podido impulsar acciones encaminadas a prevenir, documentar y denunciar hechos de tortura y otras formas de violencia de Estado, y cuyo trabajo no deja de ser además de importante y arriesgado, muy acertado.
Este reconocimiento permite visibilizar el hecho de que la tortura no ha sido una práctica de las dictaduras, sino que ha sido y es de todos los gobiernos constitucionalmente elegidos. El ITEI tiene en su base de datos 1.650 víctimas directas de tortura que tienen secuelas de tipo bio psicosocial, que no han obtenido medidas de reparación integrales, sobre todo las garantías de no repetición. Esta cifra que acabo de señalar no muestra de ninguna manera la amplitud del problema en nuestro país, es solo una muestra.
El equipo del ITEI acompaña a las víctimas en la búsqueda de la verdad y la justicia, se implica en la construcción de sujetos de derechos. Asimismo, incide en cambios legislativos como ser el ante proyecto de ley contra la tortura y la tipificación del delito de tortura en el código penal de acuerdo a estándares internacionales, con el fin de garantizar los máximos estándares en la lucha contra la tortura
Es también la voz de los sin voz: de las personas torturadas, de las personas privadas de libertad injustamente, de las comunidades que luchan por su tierra y territorio de los trabajadores que exigen empleos dignos. y mejores salarios y que como única respuesta sufren represión y tortura. Son también quienes forman promotores en salud Mental comunitaria y generan a través de la formación de profesionales pensamiento crítico y análisis fundamental para promover transformaciones sociales y que impulsan a través de sus investigaciones la conservación de la memoria histórica de las luchas sociales
Son también los que viven entre el miedo y el coraje, y eligen esta labor como una opción de vida. En Bolivia, trabajar en una organización que lucha contra la tortura, que denuncia la impunidad, que señala a los culpables de abusos, es motivo de amenazas, descalificaciones, de hostigamientos, de vigilancia.
En este contexto, este reconocimiento que hoy recibe el ITEI, hace más que evidente la importancia de su trabajo. Mientras algunas autoridades tienden a descalificar nuestro trabajo y limitar nuestra labor, nos alienta contar con instancias dentro del Estado que se preocupan porque la tortura sea aún un método de investigación, de autoinculpación de amedrentamiento social y reconozcan este importante trabajo que día a día realizamos quienes hemos asumido el trabajo en el ITEI como un compromiso socio-político enmarcado en la construcción de una sociedad justa, equitativa y respetuosa de la dignidad humana.
Gracias